con las cenizas del olivo pasado.
Ayunas, abstinencias, oración en pos de tu Luz,
caminamos en el desierto atormentados.
Supiste de la diabólica tentación,
del calor, del hambre y la soledad.
Nada muy lejos en comparación,
con nuestra actual realidad.
Estamos necesitados de amor sincero,
perdidos en crueles egoísmos infértiles
necesitamos con un poco de esmero,
reflexionar y superar los momentos difíciles.
Debemos ayunar de ideas vacías,
abstenernos de actitudes crueles y maliciosas.
Cambiar nuestra mirada con eficacia,
y gozar de relaciones humanas más beneficiosas.
Cuaresma: sendero de liberación,
desierto con destino fértíl.
Preparándonos a tu pasión,
y darnos fuerzas a nuestra Fe débíl.
MARCELA 28/02/2012