Gracias por transmitir tu magia
en cada canción que aprendimos de niño
y aunque no estés no hay nostalgia
pues tu música siempre la oiremos con cariño.
La cigarra seguirá sobreviviendo,
Manuelita con su familia en Pehuajó
y el mundo seguirá al revés viviendo
porque fue tu herencia,lo que tu vida dejó.
A tomar el té nos invitabas
con la reina Batata a la cabeza
mientras la vaca estudiaba
y el jacarandá imponía su belleza.
Por esta vez el país del Nomeacuerdo
tendrá presente una obligación:
mantener muy firme tu recuerdo
y esto no es una exageración.
Siempre que haya infantes
sonarán tus canciones alegremente
Eso será la eterna constante
que continuaremos seguramente.
No hay jardín sin tus canciones.
No hay mamá que no haya cantado
junto a sus hijos tus composiciones
tan pegadizas,que nunca hemos olvidado.
Volcaste todo tu talento de escritora
que hoy se eterniza completamente,
dejándonos un legado que se atesora
en cada alma,corazón y mente.
Partiste pero te quedas dulcemente
ya que tu obra inigualable no dejará
que nadie la olvide tan facilmente
y en cada pequeño que la cante estará.
Este es mi humilde homenaje
a tan grande y prolífica autora
que lleno mi vida de su mensaje
y que como madre transmito ahora.
MARCELA
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