En la búsqueda del bien común
te embebiste de ideales utópicos.
Tantas décadas y no se ha logrado aún,
por enredarnos en credos fanáticos.
Veías en el mundo una decadencia,
la misma diferencia en la sociedad.
¿Quién podría tener la decencia
de luchar por un mundo con piedad?
Y como todo luchador perseguido
la cárcel suele ser un destino cierto.
Tus criticas marcaron un sentido
de los cambios con mucho acierto.
Hoy con los mismos cuestionamientos,
las mismas diferencias sociales graves
te traemos al recuerdo con reconocimiento
a tus enseñanzas que dejaron puntos claves.
MARCELA BARRIENTOS 25/07/2016 Copyright
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ARGENTINA
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