a veces deja tristezas y sinsabores,
proyectos inconclusos o sueños frustrados.
Aunque también quedan las alegrías vividas,
los sueños cumplidos y las metas alcanzadas.
Concluir un año no significa cerrar ciclos,
ya que éstos no se rigen por un calendario.
Pero sí se festeja la esperanza de un mundo mejor.
Cuando un nuevo año comienza,
nos acostumbramos a recibirlo con festejos
y a veces con lamentables excesos
producto de un consumo exagerado
que no nos permite apreciar que lo importante
no es lo que gastamos sino lo que hacemos
y con quienes decidimos compartir el festejo.
Tal vez porque en el inconsciente decir nuevo
significa algo mejor apostamos a que va a ser diferente.
Pero la diferencia no está en el año como número
si no cambiamos en las situaciones en que fallamos
o no nos replanteamos los objetivos a alcanzar en la vida.
Despidamos no solo el año sino todo aquello que no sirvió
y demos la bienvenida a una nueva posibilidad de crecer.
Marcela Barrientos 26/12/2017 Copyright
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Argentina
Las mejores obras del concurso según el jurado son
Temas Fin de año año nuevo
2ª Despedida y Bienvenida de Marcela Barrientos
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