Como duele la realidad y la globalización de lo malo.
Como duele la indiferencia frente al dolor del otro.
Cuanto duele el egoísmo de ver sólo lo que queremos ver
Duele sentirse sola,y que luego te digan que no pediste ayuda
Duele pedir ayuda y que te digan que no pueden ayudarte,.
Duele esta vida cotidiana en la a que tus luchas personales le tenés que sumar toda la inseguridad de un mundo que no duda en ser violento.
Tal vez sólo sean reflexiones de un domingo,no lo sé pero viendo un documental sobre las Maras,en un día en que se cumple 15 años de un ataque terrorista al que siguieron otros tantos.Todo sumado a la situación personal da como resultado una angustia existencial profunda
0 comentarios:
Publicar un comentario