Hoy siento que todo sucede a prisa,
que el reloj del tiempo no perdona.
Atrás quedaron la infancia y sus risas,
y mi gana de volver a la inocencia desentona.
El ritmo actual nos hace correr a prisa
sin dejarnos saborear el momento vivido.
¡Oh, el reloj del tiempo cual una brisa
se has llevado lo mejor, todo lo he perdido!.
Sólo me gustaría hacerte una pregunta importante:
¿qué sientes, reloj del tiempo, cuando has pasado,
sabiendo que no nos permitido saborear ese instante
y ves nuestras lágrimas surcar porque todo ha acabado?.
Marcela Barrientos 20/06/2019 Copyright
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Argentina
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