Yatasto
Testigo de una de las reuniones históricas tal vez menos estudiadas de dos próceres argentinos de más noble espíritu e ideales.
Luego del gran abrazo inicial que demostraba la gran admiracion mutua se sentaron bajo la sombra de un árbol .
Fueron tres días de un cálido enero de 1814 donde dos hombres con altos ideales se encontraban por primera vez tras mantener un intenso vínculo epistolar.
Romper el silencio era algo difícil para dos hombres más de acción que de verborragia.
_ Agradezco a la Providencia que el gobierno lo haya elegido en mi reemplazo frente al Ejército del Norte _ comenzo diciendo don Manuel Belgrano.
_ Enorme tarea me espera para reemplazar a quien le dio los colores a nuestro ejército. He venido con el compromiso de no derramar ni una gota de sangre en ninguna guerra intestina_ respondió el General San Martín.
_ Es un honor saber que siempre hemos compartido el mismo objetivo de la verdadera independencia. Nuestro único enemigo es el ejército realista _ coincidió Belgrano.
_ Ningún gobierno me hará cambiar de opinión sobre mi único objetivo, que es también el suyo _ confirmó San Martín.
La reunión sólo confirmó que ambos próceres jamás desearon que haya una lucha entre compatriotas y que jamás matarían a un nacional ni participarían en la lucha de intereses creados por los gobiernos interinos de turno.
Creían que ese no era su objetivo central por el contrario solo deseaban la unión de los pueblos
y el respeto hacia los pueblos aborígenes.
La posta de Yatasto tuvo el inmenso privilegio de unir dos personas con un alto nivel de amor a la patria que soñaban podía ser Latinoamérica unida sin ninguna potencia extranjera que la domine.
Belgrano muere seis años después, pobre, tras una vida austera ya que el dinero que se le otorgó por sus victorias obtenidas lo donó para la creación de escuelas en el noroeste argentino.
San Martín independizó Chile y Perú tras la enorme estrategia que fue cruzar los Andes.
Una reunión fallida en Guayaquil con Bolívar lo hace decidir marcharse del país con su hija. Sinceramente creo que no tenían el mismo objetivo ni admiración mutua.
Belgrano y San Martín cumplieron con la promesa de no participar en guerras fraticidas, las mismas que han sido manejadas por los intereses británicos en este continente y que la historia no debe olvidar.
Marcela Barrientos _ Argentina
10/10/2023 ©️
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