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sábado, 25 de noviembre de 2017

MUJERES DE LA HISTORIA: EL SALVADOR

 Ana Julia Álvarez Nació en San Salvador, en 1908. Estudió pintura con el destacado artista guatemalteco Carlos Mérida, quien a su vez fue influido por el muralismo mexicano. Fue alumna en la Escuela Nacional de Bellas Artes (1929-1930), donde fue alumna de Miguel Ortiz Villacorta y de Salarrué, con quienes trabajó óleo, cartones decorativos, acuarelas, retratos y bodegones. Comenzó a exhibir durante su adolescencia, ganando varios premios artísticos dentro de las exposiciones anuales organizadas por el Club Rotario de San Salvador y la Asociación de Amigos del Arte. Según Luis Salazar Retana, ella “es la primer mujer [salvadoreña] que pinta con éxito y con profesiona­lismo en nuestro medio, en una época tan distante como los años treinta y cuarenta.” Años más tarde, emigró y se radicó en Toronto, Canadá. Al casarse, adoptó el apellido de su esposo, Boward, y tuvo descendencia. Falleció en esa localidad canadiense, en octubre de 2007.
 

CONSUELO SUNCÍN SANDOVAL-ZECEÑA

 
 
Nombre: Consuelo de Saint-Exupéry (Consuelo Suncín-Sandoval Zeceña).
Nacimiento: Armenia, Sonsonate, El Salvador, 10 de Abril de 1901.
Fallecimiento: Francia, 28 de Mayo de 1979.
 
 
Consuelo Suncín nació en Armenia, Sonsonate, El Salvador, el 10 de Abril de 1901, en una familia de aristócratas y terratenientes cafetaleros; hija de Doña Ercilia Sandoval Zeceña y el coronel Don Félix Suncíni. Desde pequeña vislumbraba una vida grandiosa en un país lejano, lo que sello su destino desde el inicio.

 
A los 19 años, consigue una beca para estudiar inglés en Estados Unidos, por lo que se traslada a vivir a San Francisco, California. Allí conoce a quien sería su primer esposo, Ricardo Cárdenas, un joven agraciado de tez blanca y padres mexicanos, que trabajaba como dependiente en un almacén de pinturas. Los jóvenes entusiasmados se casaron el 15 de mayo de 1922, sin embargo este matrimonio fue breve, puesto que Ricardo muere a los pocos meses en un accidente de ferrocarril. Viuda y con 22 años, Consuelo se muda a México, e inicia estudios de Derecho, aunque los abandona luego, cambiándolos por los de Periodismo. Estando en México conoce a José Vasconcelos Calderón, un prominente político mexicano, quien se vuelve su protector y patrocinador. En un viaje a Francia, éste le presenta al embajador guatemalteco, Enrique Gómez Carrillo, del que se enamora, contrayendo matrimonio en 1926, 11 meses después Gómez Carrillo fallece producto de un derrame cerebral. Consuelo con 25 años de edad, otra vez viuda y ahora dueña de una gran fortuna toma residencia en Buenos Aires, Argentina.
 
En 1931, uno de sus amigos, Benjamin Crémieux, le presenta al Conde Francés Antoine de Saint-Exupéry; la atracción fue instantánea. Consuelo se traslada a Francia y contrae matrimonio ese mismo año, convirtiéndose de esta manera en Condesa. Este tercer matrimonio, que se alargó durante quince años, no fue del todo idílico, en parte por la profesión de piloto de su esposo, pero principalmente por la vida bohemia de Antoine y sus incontables amantes. Todo ello terminó distanciándolos, aunque surgían de vez en cuando, momentos en que todo estaba bien y ambos eran nuevamente felices. A pesar de toda esta turbulencia matrimonial, Antoine deja plasmado sus sentimientos hacia Consuelo en su obra escrita, siendo su máximo homenaje, la representación que hace de ella en el personaje de “la rosa” de “El Principito”.
 

Tras la muerte-desaparición de su tercer marido, Consuelo para hacerle frente a esta nueva realidad y a su vez ocultar su dolor y angustia, se vuelca hacia la pintura, siendo las artes, su salvavidas. Se cuenta que en un inicio, tras la desaparición de su marido, busca trabajo como decoradora de interiores, siendo uno de sus clientes, su amigo el Marqués Salvador Dalí, a quien le diseña un aparador que muestra la imagen de una mujer tomando un baño en una tina, provocando un escándalo de grandes proporciones en la pudibunda América de esa época.
 
Consuelo continuó durante años concentrándose en la pintura y fiel al recuerdo de su último marido, utiliza la figura de Antoine en su arte y viaja por el mundo contando su historia. Se dice que no fue aceptada del todo por la realeza, sin embargo ella pudo ganarse a la gente, a través de su talento natural para hablar y relacionarse.
 
Consuelo muere en Francia en 1979, a la edad de 78 años y es enterrada en el cementerio de Père-Lachaise en París, junto a los restos de su segundo marido Enrique Gómez Carrillo, heredando todos sus bienes a su mayordomo y jardinero, José Martínez-Fructuoso.
 

     
      María de los Ángeles Miranda
María Feliciana de los Ángeles Miranda fue una prócer salvadoreña, y líder de uno de los primeros alzamientos contra las autoridades españolas en 1811. El 5 de noviembre de 1811 los presbíteros José Matías Delgado, Nicolás, Vicente y Manuel Aguilar y el general Manuel José Arce, entre otros, lanzan el primer movimiento independentista en San Salvador contra las autoridades de la Capitanía General de Guatemala, a la que pertenecía la Intendencia de San Salvador.
 
Las hermanas María Feliciana de los Ángeles y Manuela Miranda difundieron las noticias del movimiento patriota en la campiña de Sensuntepeque, promoviendo un levantamiento general contra los realistas.
 
El 29 de diciembre de 1811​ los patriotas salvadoreños: comisarios Juan Morales, Antonio Reyes, Isidro Cibrián y las hermanas María Feliciana de los Ángeles Miranda y Manuela Miranda, iniciaron una insurrección en Piedra Bruja (una roca con petroglifos ubicada camino de San Lorenzo), territorio norteño de Sensuntepeque del actual departamento de Cabañas,2​ seguidos por hombres procedentes de los caseríos de San Lorenzo, El Volcán, San Matías, La Bermuda y Santa María
 
 
Tras asaltar la población de Sensuntepeque, tomar el cuartel y plaza de armas y deponer a las autoridades coloniales presididas por el teniente subdelegado José María Muñoz, carentes de apoyo en Sensuntepeque y de los refuerzos esperados de Guacotecti, los patriotas tuvieron que dispersarse.
 
Perseguidos y capturados por los españoles, Sibrián, Morales y Reyes fueron enviados prisioneros al Castillo de Omoa, Honduras.​ Las hermanas Miranda, por su parte, fueron procesadas en Sensuntepeque mientras permanecían recluidas en el convento de San Francisco de la localidad de San Vicente de Austria y Lorenzana.
 
Fueron condenadas a sufrir cien azotes y a trabajar como siervas sin paga en la casa del párroco doctor Manuel Antonio de Molina y Cañas, cura del templo del Pilar y en ese entonces realista acérrimo que llegó a tachar el movimiento como sacrílego y reafirmó el juramento de fidelidad a Fernando VII de España.​
 
La sentencia fue ejecutada por el verdugo frente a la multitud reunida en la Plaza Central de San Vicente en el primer trimestre de 1812.
 
LIDERAZGO, SUEÑO Y ARTE
María de los Ángeles, junto a tu hermana lideraron
unos de los primeros intentos de emancipación en su país
el gran coraje de ustedes no tuvo el éxito deseado
pero la historia hoy les reconoce que su muerte no fue vana.
Consuelo, el ejemplo de una mujer que siguió sus sueños.
Tras quedar viuda dos veces siendo muy joven conoce
a Antoine de Saint Exupéry,que la inmortalizó en la rosa,
uno de los personajes de “El Principito”, la más importante.
Ana Julia, pintora que dio fama a su país con sus obras al óleo,
has legado un homenaje a la raza indígena en tus pinturas
y aunque te fuiste de tu país natal, desde tierras extranjeras
conservaste lo esencial y la riqueza de toda tu original cultura.
MARCELA BARRIENTOS 20/11/2017 ©
DERECHOS DE AUTORA RESERVADOS
ARGENTINA

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